Una WordCamp no acaba hasta que escribes sobre ella, así que os voy a contar cómo fue mi experiencia del fin de semana pasado en WordCamp Granada 2018.
Como en ocasiones anteriores, tuve el honor y el privilegio de participar como ponente en el día de la WordCamp y como líder de la Mesa de Diseño en el Contributor Day.
Todo empezó el jueves por la mañana, con un viaje en coche desde Madrid con Nati e Inés. Me dejaron en el AirBnb que había reservado para pasar el fin de semana con Pablo y José Ángel.
Por la tarde, estuve trabajando un poco… los que mimamos a nuestros clientes siempre tenemos alguna tarea que atender: suerte que el workation nos permite trabajar en cualquier parte y situación.
Enseguida mi móvil empezó a sonar: mis amigas, Priscilla y Piccia, me preguntaban si nos veríamos esa noche en la Meetup de WordPress Granada, a lo que contesté que por supuesto, ¡no me suelo perder ni una! Las reuniones de WordPress son mis eventos preferidos.
Así que quedé cerca de la Meetup con Pris y Diego y allí estuvimos esperando, sin saber que el bar que habíamos elegido era exactamente el lugar donde habíamos quedado después. Tomamos las primeras tapillas, que me supieron a gloria.
Después fueron llegando todos los demás: Rocío y Roberto (anfitriones de la Meetup), todos los organizadores de la WordCamp y otros tantos amigos, que nos vemos de vez en cuando y, como dice Rocío, nos saludamos como familiares que se reencuentran en las bodas. Suerte que en España este año hemos tenido prácticamente una «boda» cada mes ¡y a estos amigos de WordPress los he disfrutado más que a muchos familiares!
Disculpad, por favor, que no os nombre a todos. Sí quiero hacer especial mención a Anastasios y Sveta, como miembros internacionales de la comunidad WordPress, que nos conocemos de otras WordCamps, y estuvimos charlando todo lo que mi inglés nos permitió. Ah, y aprendí a brindar en griego: Yiamas!
No tengo la costumbre de irme a casa la primera, así que Pablo y yo, que volvíamos juntos al alojamiento, nos fuimos los últimos, con José Luis, en el coche de Casares, que muy amablemente nos llevó a casa.
A la mañana siguiente, desayunamos una buena tostada de jamón con tomate, que nos supo a gloria. Pasamos una mañana muy agradable, paseando desde la Ribera del Genil hasta el Mirador de San Nicolás, y vuelta, con parada técnica para tomar un café en el Paseo de los Tristes.
Una vez más, mi teléfono empezó a sonar y, en un rato, nos juntamos para comer Pablo, Fernando Tellado, Rocío, Fernando Puente, Jaime, Vidania, Miguel y Laura. Se quejaron mucho de que les llevara a un italiano, en Granada, pero me negué a ir de tapas porque después teníamos que ir al Contributor y había que ir con la mente despejada, ya que teníamos mucha responsabilidad. Además, cerca de la plaza de toros tampoco es que haya mucha oferta…
El Contributor Day fue muy productivo para el equipo de Diseño de WordPress España. Me traje deberes para un futuro muy próximo, con nuevas ideas que creo que van a mejorar mucho la dinámica de trabajo que llevamos realizando hasta ahora. Próximamente lo compartiremos en el canal de Slack de WordPress España, de acceso público previo registro en WordPress.org.
Muchas gracias a todos los que pasásteis por la Mesa de Diseño. Aquí una representación de los que estuvimos contribuyendo.
Por la noche, antes de ir a la cena de ponentes, estuvimos tomando unas tapillas Jaime, Vidania, Nahuai, Pablo y yo. Las risas serían el preámbulo de todo lo que nos reímos después en la cena. Somos de lo que no hay.
Disfrutamos de una cena de ponentes con las mejores vistas que podíamos tener. Me reencontré con más amigos, como Beatriz Lavela, Mónica, Víctor y Paco, y estuve charlando un montón de rato con Nahuai y con Daniel Serrano (mi podcaster favorito). Nos reímos un montón gracias a los amplios conocimientos sobre name-dropping que tiene Nahuai (aunque he de decir que nos enseñó un significado distinto del que tiene en la Wikipedia y, dicho sea de paso, la versión de Nahuai mola mucho más).
El día de la WordCamp siempre amanece muy emocionante. Para mí esta iba a serlo aún más, ya que había quedado con mis tías en la entrada del Palacio de Congresos. Pipi, Pachi, Sagri y Loli me estarían esperando para acompañarme en ese día tan especial, en el que pasaríamos el día con mis amigos de WordPress, compartiendo vivencias y conocimiento.
Desde el primer momento, mis titas granaínas se asombraron de que la comida estuviese incluida con la entrada. Y, a medida que avanzaba la WordCamp, se maravillaban de todo lo que iban descubriendo. «Esto es el siglo XXI», me decían, al enterarse de que organización y ponentes éramos voluntarios, que compartíamos conocimiento y entregábamos nuestro tiempo a la comunidad de manera desinteresada.
Cuando vieron a Fran Torres cantar, en lo que fueron los Opening Remarks más épicos de la historia de las WordCamps en todo el mundo, entendieron por qué les dije que la charla de apertura no se la podían perder. Ninguno sabíamos lo que iba a pasar, pero conociendo a Fran, las expectativas de que algo grande iba a pasar eran muy altas (¡y las superó con creces!).
Les gustó mucho la charla de Javier Casares, porque ellas también usaban ordenadores en los 80, y la disfrutaron muchísimo. La verdad es que solo por ver a Javi con ese atuendo, la charla ya merecía la pena.
Fernando Tellado, gran comunicador, nunca defrauda. Esta vez la charla era de nivel alto y, para comprender bien el mensaje, había que tener algunos conocimientos previos, tanto de lo que ocurre en la Comunidad WordPress a nivel internacional como del propio editor de bloques de WordPress.
Antes de la comida nos hicimos la foto de grupo. Bueno, las fotos de grupo, porque fueron dos, en dos localizaciones diferentes. Supuse que estarían haciendo tiempo mientras reposaba el arroz.
La comida fue espectacular, totalmente a la altura del resto del evento. Tanto las distintas variedades de paella como los canapés estaban deliciosos y disfrutamos muchísimo. Incluso nos tomamos unas cervecillas, que nos sentaron fenomenal. Una comida de 10, tanto en calidad, como en calidad. Enhorabuena a la organización, porque no es fácil dar de comer a más de 300 personas y que todo salga tan bien. Chapó.
El track de diseño era muy atractivo para mis tías: tanto el color como el design thinking serían temas muy bonitos e interesantes. Así que después de comer, nos quedamos en el track B.
Mónica insiste en la importancia de la jerarquía en el diseño en #WCGranada Muy bonita ponencia sobre color en la web de @monbio pic.twitter.com/kj7JBtoXSA
— Ana Cirujano Ⓦ (@acirujano) November 17, 2018
El diseño no es "poner las cosas bonitas". Grande @Piccia 👏👏👏 pic.twitter.com/iJHWbWKKD8
— Ana Cirujano Ⓦ (@acirujano) November 17, 2018
Como cuatro groupies, mis tías estaban entusiasmadas con mi ponencia. Me puse un poco nerviosa al principio y me lié un poco con el orden de las diapositivas, pero enseguida me dejé llevar y creo que salió bastante bien. El tema de las fuentes variables es apasionante.
Piccia, casi lloro de la emoción al ver este tuit. Gracias, de verdad, amiga.
Por fin, la mejor: @acirujano, la reina de la tipografía que nos cuenta de fuentes variables, el futuro de la web. #typography #WcGranada #WordPress #webdesign pic.twitter.com/oORoG62GEa
— Piccia (@Piccia) November 17, 2018
Lo mejor de todas las WordCamps son siempre las personas con las que estás. Muchas se convierten en grandes amigos.
Hablar con Fernando Puente es siempre aprender algo, aunque no le preguntes nada, algo te llevas. Me gustó mucho poder charlar con Fernando Muñoz, ¡aunque se me hizo muy corto! Y volver a ver a María Carrera, aunque también hablamos menos de lo que me habría gustado.
Después del café tocaba la ponencia de Pablo. Esta charla me encantó porque tuvo todo lo que tiene que tener una charla excelente: una historia con ritmo, con ejemplos prácticos, con gancho y con participación del público, que se llevó una idea básica y clara de lo que hay que hacer para que una web consiga sus objetivos. Enhorabuena, Pablo.
Cuando acabó la WordCamp mi teléfono empezó a sonar de nuevo y organizamos una cena de tapas antes de ir a la After Party: Piccia, Beatriz Lavela, Juan, José Luis, Carlos (sí, el que ganó la silla de Dinahosting en Pontevedra) e Iván. Rocío también vino y se trajo a tres estudiantes de marketing. Casualmente, a la salida de la WordCamp, uno de ellos le había pedido a Pablo hacer prácticas en su agencia, y otro había estado en la Mesa de Diseño del Contributor, así que ya nos conocíamos.
En esta WordCamp eché de menos a Moncho y también a Vanesa. ¡Espero que nos veamos en las próximas! (WordCamp Zaragoza y Las Palmas 2019).
La After Party era una discoteca, así que en cuanto pude hice presión para irnos a un sitio más tranquilo, como se suele decir. Estuvimos tomando unas cervezas hasta que nos cerraron el único bar que encontramos abierto y nos fuimos pronto a casa.
El domingo no tuve tiempo para hacer la ruta turística, aunque me habría encantado. Pasé a despedirme de algunos, con mucho cariño y, dejándome llevar por una serie de coincidencias asombrosas, me fui a Fuengirola con mi amiga Beatriz Lavela. Hicimos un viaje muy ameno, hablando de trabajo (obviamente). ¡Gracias, Bea!
No quiero terminar sin agradecer, una vez más, a todos los organizadores, voluntarios y patrocinadores de la primera WordCamp de Granada, porque habéis hecho una WordCamp de libro, superando todas las expectativas. Os habéis pegado un currazo impresionante, y se ha notado mucho. Os lo digo de corazón, y sé de lo que hablo, que este año he ido a todas las de España, y parte del extranjero. Ole, ole y ole.
Créditos de las fotos: Pablo Moratinos, AndererWinkel y Marco A. Cerón.
Pablo Moratinos
23 de noviembre de 2018 — 10:27
Qué guay volver a revivir todo justo una semana después. La verdad es que no me importaría entrar en bucle y pasarme el resto del año hablando de WordPress, de tapas y de cañas con buenos amigos 😀
Un abrazo fuerte
Ana Cirujano
23 de noviembre de 2018 — 11:04
WordPress, amigos, cañas y tapas se parece mucho a mi idea de Felicidad 🙂
Nahuai Badiola
23 de noviembre de 2018 — 12:25
¡Qué bueno revivir la WordCamp de nuevo!
La verdad es que fue una WC redonda 🙂
Por cierto, yo recuerdo dar una explicación muy cercana a la de la Wiki, pero a saber…. jejeje!
En la siguiente (Zaragoza? Las Palmas?) lo terminamos de comentar 🙂
Eso sí, las risas que echamos no nos las quita nadie, jeje!
Un abrazo y hasta la siguiente 😉
Ana Cirujano
23 de noviembre de 2018 — 13:13
Gracias por comentar, Nahuai. Creo que tú nos explicaste algo muy parecido, pero te referías a palabros más que a nombres de personas importantes, ¿no? De todas formas, si lo entendí yo mal, mereció la pena igualmente… jajaja ¡Nos vemos pronto, un abrazo!
José Luis Losada
24 de noviembre de 2018 — 16:10
Me gusta mucho tu última frase, de las cinco WordCamp españolas en las que estuve este año no puedo escoger una como la mejor, cada una ha tenido su aspecto destacado y eso es una gran cosa, me quedo con lo común a todas: encontrarte en cada una de ellas y charlar un rato.
Poco a poco vamos siendo como una familia, dispersa pero en contacto. Yo por lo menos ya miro la lista de asistentes para a saber a quien de los que conozco me voy a encontrar, y en cada una la lista se va haciendo más grande.
Nos vemos en la siguiente.
Ana Cirujano
24 de noviembre de 2018 — 20:23
José Luis, tú siempre tan cariñoso. Muchas gracias. Yo después de cada WordCamp siempre tengo el impulso de pensar que sido la mejor, pero cuando recuerdo las demás, cada una destaca por lo suyo. La verdad es que todas destacan por lo mejor: amigos compartiendo.